Muy cerca de Guanajuato y tras varias lomitas está la cuna de la Independencia: Dolores Hidalgo. Este pueblo mágico se llama así porque en el atrio de su iglesia Miguel Hidalgo dio el Grito de Dolores la madrugada del 16 de septiembre de 1810, dando inicio a la Independencia de México.
Aquí podrás aprender todo sobre los inicios de la Independencia en el Museo-Casa de Miguel Hidalgo, la Parroquia de Nuestra Señora de los Dolores y el Museo de la Independencia Nacional.
Para refrescarte después de tanta historia puedes tomar una de las famosas nieves en la plaza central, hay de cerveza, camarón, tequila, queso, aguacate, nopal y muchos otros sabores poco populares.
Y si de artesanías se trata, Dolores Hidalgo es especialista en mayólica estilo talavera. Aquí puedes encontrar desde una taza hasta toda una vajilla, macetas, adornos y saleros de talavera a precios mucho más accesibles que en otros lugares y de gran calidad.
Además, aquí también nació José Alfredo Jiménez, considerado el mejor compositor mexicano de música ranchera ¡de todos los tiempos! En Dolores está la casa en donde nació y ahora es un museo en donde puedes ver toda su trayectoria. Un poco a las afueras de la ciudad está el panteón, en donde puedes admirar su tumba mientras escuchas una de sus canciones y hasta te tomas un tequilita con los músicos. ¡Salud!