Los verdaderos hombres

Los lacandones o hach winik

En el sur de México habita un pueblo originario que huyó hacia la selva Lacandona con esperanzas de salvar su cultura y su estilo de vida. Los lacandones o hach winik, “los verdaderos hombres” siguen salvaguardando sus tradiciones y son considerados como uno de los pocos grupos indígenas “puros” que existen en el mundo.

Los “verdaderos hombres” hablan hach t’an, la “verdadera lengua”, que pertenece a la familia de las lenguas maya-yucatecas. ¡Pero si habitan en Chiapas! Correcto, pero no siempre fue así.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por México desconocido (@mexicodesconocido) el

Los lacandones se consideran originarios de la península yucateca y del Petén guatemalteco, pero huyeron hacia la selva chiapaneca para evitar ser congregados en “pueblos de paz”, establecidos por autoridades coloniales. Una vez que emigraron los españoles intentaron colonizarlos varias veces, fracasando debido al difícil acceso a las zonas donde habitaban y a la renuencia de los grupos.

Este grupo usa túnicas blancas de algodón como prenda principal, llevan el cabello largo, algunas veces con fleco para los hombres y agarrado en una cola o una trenza para las mujeres, quienes además usan una falda colorida y se adornan con collares hechos de semillas y cuentas de colores.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Rodo Mercado-Ritz (@rudymarket) el

Los lacandones actualmente habitan la Selva Lacandona y se dividen en dos grupos: los del norte y los del sur, sumando alrededor de 1,100 integrantes en 7 localidades. Algunas comunidades han creado centros ecoturísticos como Naha, Metzabok, Lacanjá y Chansayab y trabajan para preservar la selva chiapaneca.

Ya que los lacandones no fueron colonizados, se conservan las visiones religiosas precolombinas. Su religión se basa en los ciclos de la naturaleza y siguen adorando a los dioses supremos en los sitios arqueológicos de la región, sobre todo en Yaxchilán.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Ángel Sierra (@angel_sierrag) el