Al norte del estado de Veracruz está el lugar donde los hombres pájaro nacieron, una ciudad fundada por los totonacas entre los ríos Tecolutla y Cazones: Papantla, que significa “lugar de la luna buena” o “lugar de papanes”, pájaros ruidosos.
La zona se empezó a poblar después de que los totonacas fueron desplazados de Mixquilhuacan por los chichimecas y fundaron El Tajín. Durante la época colonial fue una alcaldía y una villa y en 1910 fue nombrada Papantla de Olarte en honor al jefe totonaca Serafín Olarte, que combatió contra los españoles durante la Independencia.
Dice la leyenda totonaca que en Papantla los dioses le dijeron a los hombres “bailen, nosotros observaremos” y para agradarlos los hombres empezaron a volar, creando el tradicional espectáculo de los Voladores de Papantla que seguro todos hemos visto a lo largo y ancho de México.
Además de la tradicional danza de los Voladores de Papantla, aquí se practica la danza de las guaguas, representando a hombres adoradores del Sol y la danza de los negritos, que parece originarse de los rituales mágicos llevados a cabo por los esclavos africanos.
Cerca de Papantla hay dos zonas arqueológicas impresionantes: El Tajín, “la ciudad de los muertos y de los truenos en tempestad”, uno de los centros religiosos más importantes de Mesoamérica con 165 edificios y 17 juegos de pelota; y Cuyuxquihui, una fortaleza prehispánica y centro ceremonial que fue conquistado por los aztecas.
En cuanto a gastronomía, son famosas las empanadas de hongo de chaca, los frijoles en caldo con chícharos, los bocoles rellenos de pollo y por supuesto, no puedes dejar de probar la famosa Vainilla de Papantla ya sea en nieve o dulces.