No sé si es el nombre pegajoso o esa composición que se ve mexicana, pero en muchos lugares del extranjero piensan que todos los mexicanos comemos chimichangas. Y bueno, sí hay algunas zonas del país en donde se comen, pero no son lo más representativo, incluso he escuchado mexicanos decir que nunca las han probado, ¿tú sí?
Las chimichangas son básicamente un burrito en tortilla grande pero frito; la tortilla va rellena de carne deshebrada, pollo, carne molida u otras opciones, además de llevar arroz y frijoles y se dobla en su tradicional forma de rectángulo, después se fríe en aceite o manteca y se sirve con queso, crema, guacamole y salsa.
Este burrito rectangular es muy popular en el norte del país, sobre todo en Sonora, Sinaloa y Chihuahua, de ahí que los gringos lo tomaran como estandarte de la comida mexicana. Y es que si vas a un restaurante mexicano por allá, seguro que uno de los especiales es la chimichanga.
Cuenta por ahí, que el platillo norteño nació en Chihuahua cuando a una señora se le cayó un burrito en aceite hirviendo. Dicen que el nombre se originó porque quería gritar una grosería pero como había niños presentes gritó ¡chi…michanga! Y desde entonces se les dice así.