La Rumorosa es una carretera ubicada en el norte de México, entre Mexicali y Tecate en Baja California, para ser exactos. Es famosa por sus 20 kilómetros de curvas y pendientes empinadas por la que se hizo acreedora al apodo de “la carretera de la muerte”.

Esta carretera son realmente dos tramos de dos carriles cada uno, separados, uno de bajada y otro de subida, a 1232 metros de altura sobre el nivel del mar. Y es llamada así  por el ruido que produce el viento al estrellarse en las paredes rocosas que pareciera escucharse voces.

El paisaje es de otro mundo, por donde voltees, verás piedras enormes y pequeñas de tonos café apiladas formando montañas de grandes barrancos. En el fondo podrás observar cientos de automóviles y trailers que no tuvieron mucha suerte en las curvas.

En el trayecto de La Rumorosa, hay varias paradas que se pueden hacer, una de ellas es el Ex-cuartel militar “Campo Alaska”, que en 1955 funcionaba como manicomio y hospital para aislar a enfermos de tuberculosis. Y que, hoy en día, es un museo que expone fotografías de la construcción de la carretera.

Otros lugares a visitar son El Vallecito, una zona arqueológica que tiene pinturas rupestres elaboradas por los Kumiai. O, la Casa de Piedra, un geoparque donde puedes practicar rapel, andar en bici, escalar y hasta lanzarte por la tirolesa, todo con la increíble vista de La Rumorosa.

Si no llevas mucho tiempo, tan solo puedes parar en alguno de sus descansos donde podrás observar la belleza y grandeza de La Rumorosa y sacar una buena foto para compartir en tus redes sociales y que, seguramente, tendrá muchos y merecidos likes.